El saxofonista Lee Konitz, uno de los últimos grandes clásicos del jazz moderno, nos dejó el pasado mes de abril de este año de 2020. Más de setenta años de carrera musical, dieron para mucho, desde su periodo formativo en los grupos experimentales del pianista Lennie Tristano a finales de los años 40 del pasado siglo, pasando por su participación en las legendarias sesiones de The Birth of the Cool, al lado del trompetista Miles Davis y su noneto y una discografía de al menos 160 albumes como líder y otros muchos como sideman que constituye un inmenso legado musical de valor incalculable. Un hombre que lo había tocado todo, con todos, con un estilo y un lenguaje improvisativo únicos e inconfundibles. A sus 92 años, y con esa impresionante trayectoria, había ascendido, por derecho propio a la categoría de los mitos vivientes, un artista incombustible, al que solo la muerte ha sido capaz de apartarle de los escenarios.